Además de los paisajes, que son una de las cosas más bonitas de las que se puede disfrutar en el Parque Nacional de Picos de Europa, también hay que destacar su variada fauna, dentro de la cual, la fauna doméstica se integra perfectamente en el ambiente.
Durante la Ruta del Cares me topé con dos aves muy interesantes, el mirlo acuático y el treparriscos.
Una de las estructuras relacionadas con la fauna silvestre que no hay que dejar de ver es el Chorco de los Lobos en el Valle de Valdeón, una trampa que se utilizó durante muchos años para la captura de lobos.
Aunque al hablar de fauna indudablemente el rey del parque es el rebeco, que domina los picos hasta las zonas más altas.
Tuve la suerte de toparme con un pequeño grupo y tras un breve rececho pude tomar algunas fotos interesantes.