¿En que momento del día están más activos? ¿Cuándo podemos ver corzos fácilmente? Si estas preguntas se las hacemos a algún cazador la respuesta llegará rápidamente: al amanecer y atardecer. Para saber si esto es cierto en cualquier época del año y para cualquier corzo, hemos revisado tres trabajos que se ocupan de los patrones de actividad del Capreolus1-3.
El primero se realizó en Inglaterra1 y comprobó que en los machos no hay diferencias estacionales en las distancias diarias recorridas. En las hembras, esta es mayor en enero-febrero y menor en mayo-junio, coincidiendo con la crianza.
Los corzos están activos aproximadamente la mitad del tiempo (56%). Los picos de actividad al amanecer y al atardecer están claramente definidos y en la mayoría de las épocas del año los tiempos de actividad nocturna son superiores a los de actividad diurna.
Autor fotografía: José Luis Martín Madrigal.
En otro estudio sueco2 se estudiaron los patrones de actividad en 24 horas en un bosque boreal. Nuevamente se comprobó que generalmente los corzos están más activos con la salida y la puesta del sol. El porcentaje de actividad diaria varía con la estación. Los corzos están activos más de la mitad del día (un 57%) en mayo-junio y menos en febrero (un 30% del día).
Además, la duración de los periodos de actividad es también diferente (99 minutos en primavera frente a 49 minutos en febrero). En verano, los corzos llegan a 26 períodos de actividad diarios, el máximo anual.
Autor fotografía: Manuel López Fons.
El tercer trabajo fue realizado en Italia en 2.0083. Nuevamente, la máxima actividad se constató en los alrededores del orto y el ocaso en todos los casos. Las hembras fueron más activas durante el día que los machos. Los machos están más activos al comienzo de agosto (42% del tiempo diario) y menos en diciembre (29%) mientras que las hembras tienen menos actividad en febrero (29%).
1Chapman, N. G., Claydon, K., Claydon, M., Forde, P. G. and Harris, S. Sympatric populations of muntjac (Muntiacus reevesi) and roe deer (Capreolus capreolus): a comparative analysis of their ranging behaviour, social organization and activity. Journal of Zoology 1993;229:623–640.
2Cederlund, G. (1989), Activity patterns in moose and roe deer in a north boreal forest. Ecography, 12: 39–45.
3Activity patterns of collared roe deer individuals in North-eastern Apennines, Italy. Pagón N et al. POSTER PRESENTATIONS – 9th European Roe Deer Conference, 2010.